¡Cuatro, en busca de la Final!

 

La Hidalgo, Kawatzin, Plan de Ayala y Lázaro Cárdenas

Poza Rica, Ver.- A tambor batiente trabaja el comité organizador con miras al cerrojazo de la Copa Vanguardia 2017 de Futbol. Están puestas las Semifinales de la competencia y los cuatro grandes trabajan a puerta cerrada con miras a los partidos que le abrirán la puerta del cielo o el infierno, pues sólo dos podrán accesar a la ansiada Gran Final de la fiesta deportiva respaldada por el Diario Vanguardia.

Será el próximo fin de semana cuando se enfrente la penúltima jornada de la actividad, están en la línea Somos Hidalgo, como mandamás de la Gráfica I. Kawatzin F.C. sobreviviente de la Gráfica II, Plan de Ayala F.C. en la Gráfica III y LázCár Pollerías Martínez de la Gráfica IV. Con estos ingresos tres municipios son los que se involucran en la recta final de la fiesta.

Estos cuatro gigantes del futbol de sectores locales, desde el sábado mismo fueron puestos entre algodones por su cuerpo técnico y patrocinadores, que buscan llevarse uno de los títulos que está encaminado a ser el más cotizado de Poza Rica y la región.

Somos Hidalgo, pese al marcador, tuvo complicaciones para doblegar a unos aguerridos abarroteros que le pusieron algo más que corazón a este compromiso, exhibiendo un nivel de aplaudir en toda la competencia.

Kawatzin sufrió las mismas ante Guerreros FIM, quien corrió la milla y empujó, teniendo el coraje para levantarse de un dos por cero, pero la ansiedad le ganó a su zaga, que cometió una pena máxima en la agonía del partido, dejando escapar al menos la tanda de penales.

Los agraristas fueron quienes menos problemas tuvieron ante su conocido rival, a quien ya se habían impuesto en la primera fase y en ésta, con más conocimiento pudieron pasearlo en el Tres Amigos y pisar las Semifinales con gran personalidad, dejando en claro que el entrenamiento diario rinde frutos.

La colonia Lázaro Cárdenas fue quien más dramatismo le puso a su boleto, ante un insolente Insurgentes P-14, quien no respetó estrellas ni jerarquías, practicando un futbol de buenas hechuras. La gente del Ranulfo “Whisky” Acosta tuvo en su puño a un sector futbolero de corazón, pero a quien no terminó de asfixiar, cuando pudo.